¿Estás en una relacion de trabajo abusiva?
- Neurohealth RD
- 16 may 2024
- 7 Min. de lectura
Actualizado: 2 jun 2024
Aprende a reconocer las señales y cerrar el ciclo.
Podrías encontrarte atrapado en un ciclo de culpa y sobrecarga de responsabilidades, al estar sometido a constantes mensajes que dañan tu confianza, te dejan vulnerable y con problemas en diferentes ámbitos de su vida.

12 señales de que estás en una relación de trabajo abusiva
Desvalorización del trabajo: Te desvalorizan o no reconocen tu esfuerzo, y estás expuesto a constantes críticas no constructivas. Por ejemplo: “¿Esa es la mejor idea que se te ocurre?”. Esto puede hacerte sentir inferior, inseguro y desmotivado.
Plazos imposibles y responsabilidades excesivas: Te asignan tareas con plazos imposibles o responsabilidades que exceden tu rol sin ofrecer los recursos necesarios. Esto puede ocurrir cuando no hay una definición clara del cargo. Provoca sensación de agobio, desesperanza y frustración.
Control excesivo: Hay una supervisión constante y falta de confianza en tu capacidad para realizar tareas de manera autónoma. Por ejemplo, tu jefe se coloca cerca de ti e interrumpe frecuentemente para pedir explicaciones o hacer correcciones sobre tu trabajo sin avisarte. Esto genera problemas de autoconfianza, frustración y una sensación de paranoia.
Cambio repentino de objetivos: Modifican los objetivos y metas sin previo aviso y esperan que te adaptes inmediatamente. Por ejemplo, te solicitan un trabajo para la mañana siguiente cuando fue pedido a última hora del día anterior. Esto genera confusión, inseguridad y estrés.
Excesivo "aliento": Te hacen sentir que sin tu presencia no sería posible sacar adelante la empresa. Por ejemplo: “qué bueno que decidiste seguir trabajando con nosotros, sin ti sería imposible”. Esto genera una sensación de sobrecarga, culpa y lástima por el empleador, y te hace sentir como un mártir.
Manipulación emocional: Te hacen sentir responsable por situaciones fuera de tu control. Por ejemplo: “Si te hubieras quedado trabajando un poco más ayer, hubiéramos terminado el proyecto hoy”. Esto genera culpa, ansiedad y miedo.
Exclusión social: Te excluyen de actividades grupales o beneficios con la excusa de que aún no has concluido alguna asignación, aun cuando sabes que era imposible cumplir con ella en ese tiempo. Por ejemplo: “Bueno, ya todos nos vamos, tú te irás cuando hayas terminado”. Esto provoca tristeza, soledad y una sensación de no pertenecer al grupo.
Lenguaje ofensivo y humillante: Utilizan lenguaje ofensivo y humillante para degradarte, a menudo en público, o aluden a situaciones personales irrelevantes para el trabajo. Ejemplo: “Qué estupidez, con razón te dejó tu esposa”. Esto provoca vergüenza, humillación y miedo.
Amenazas y chantajes: Usan amenazas directas o indirectas para coaccionarte a cumplir con demandas irrazonables. Por ejemplo, amenazan con despido si no aceptas trabajar horas extras sin compensación o que no alcanzarás cierto mérito como un ascenso o aumento de sueldo si no te esfuerzas más. Esto genera una sensación de estar atrapado, miedo, ansiedad y desesperación.
Prioridades de la empresa sobre las personales: Te piden posponer necesidades personales, de salud (como cancelar citas médicas) o familiares para dar prioridad a las de la empresa. Esto provoca sensación de injusticia, sofoco y malestares en otros ámbitos de tu vida.
Expectativa de sacrificio sin compensación: Tu jefe hace sacrificios por la empresa y espera lo mismo de ti sin ofrecer compensación, se coloca como ejemplo a pesar de que eres consciente de que él lo hace porque si obtendrá beneficios. Esto genera sensación de injusticia o una sensación de que nunca es suficiente.
Coaliciones para presionar: Te involucran en coaliciones para aplicar presión sobre otros empleados, creando un ambiente de trabajo tóxico y de intimidación.
¿Cuáles son las características psicológicas que pueden hacer a una persona más vulnerable a caer en relaciones de abuso laboral?
Baja autoestima que lleva a que la persona tenga una percepción negativa de sí misma y una falta de confianza en las propias capacidades. Haciéndolo más propenso a:
Aceptar y asumir las críticas negativas sin cuestionarlas, internalizando los comentarios despectivos, como descripciones personales y de una situación en particular. Por ejemplo: no es lo mismo “Hay un error en el informe que redacté” a “Todo lo que hago tiene errores, yo soy un error”.
Tener dificultades para establecer límites y defender sus derechos en el entorno laboral.
Conformarse con situaciones abusivas para evitar conflictos o porque creen que no merecen algo mejor.
Alta necesidad de aprobación, el deseo intenso de ser aceptado y valorado por los demás puede llevar a los empleados a priorizar las opiniones y deseos de sus superiores, haciéndolo más vulnerables a:
Hacer concesiones y aceptar condiciones abusivas para obtener reconocimiento.
Tolerar abusos, para evitar confrontaciones por temor a no ser aceptados.
Volverse emocionalmente dependientes de la validación externa que representan sus jefes.
Inseguridad, inestabilidad emocional y dificultades para manejar el estrés, que los vuelve más susceptibles a:
Experimentar ansiedad elevada y crónica, que los hace sentir en peligro constante y los puede llevar a ceder frente a demandas irrazonables.
Tener dificultades para recuperarse de los episodios de abuso y desarrollar problemas de salud mental a largo plazo.
Altos niveles de responsabilidad, aunque este rasgo es considerado positivo, también puede aumentar la vulnerabilidad al abuso, porque suelen ser personas con tendencia a:
Buscar la perfección, trabajar en exceso y aceptar tareas irrazonables.
Imponerse altos estándares y culparse a sí mismos por cualquier fallo.
Aceptar tareas adicionales o condiciones abusivas, para demostrar que “sí pueden con todo”.
Personas con rasgos de personalidad afables y pacíficos, que buscan evitar confrontaciones para mantener la armonía a toda costa, esto los vuelve propenso a:
No confrontar el abuso y aceptar condiciones injustas para mantener la paz.
Justificar el comportamiento abusivo de sus jefes o superiores, debido a una tendencia a preocuparse más por los sentimientos de los otros que los propios.
Impacto en la salud física y emocional
Burnout (Síndrome de desgaste profesional): un estado de agotamiento físico, emocional y mental causado por el estrés prolongado y el abuso laboral, y se manifiesta como agotamiento extremo, despersonalización y bajo rendimiento. Los síntomas incluyen una actitud distante hacia el trabajo, disminución de la productividad y susceptibilidad a enfermedades.
Estrés crónico: caracterizado por fatiga constante, dolores de cabeza y tensión muscular. El estrés crónico debilita el sistema inmunológico, aumenta el riesgo de enfermedades cardiovasculares y provoca problemas digestivos.
Fatiga y agotamiento físico: La presión constante para cumplir con demandas irrazonables y trabajar en un entorno hostil puede llevar al agotamiento físico, manifestándose como una sensación persistente de cansancio, problemas de sueño e insomnio, así como dolores corporales y falta de energía.
Problemas psicosomáticos: que se caracterizan por dolencias físicas originadas o agravadas por factores emocionales, incluyen síntomas como dolores de cabeza, problemas dermatológicos, trastornos alimentarios o dolores físicos sin causa médica clara, ansiedad y depresión.
Ansiedad: se manifiesta como preocupaciones constantes, ataques de pánico y fobias específicas. Los síntomas pueden incluir tensión, miedo y dificultad para concentrarse.
Depresión: generando sentimientos de desesperanza, baja autoestima y aislamiento social. Los síntomas abarcan tristeza persistente, pérdida de interés en actividades y cambios en el apetito.
Trastorno de Estrés Postraumático (TEPT): El TEPT puede surgir en individuos expuestos a eventos traumáticos repetidos, como el abuso laboral severo, causando recuerdos intrusivos, evitación de situaciones y estado de hiperactividad. Los síntomas incluyen flashbacks, pesadillas e irritabilidad.
¿Cómo puedo salir de esto?
Si ya reconociste que te encuentras en esta situación, la psicoterapia es una herramienta valiosa para abordar los efectos emocionales y conductuales del abuso laboral y para ayudarte a salir de allí. Es particularmente importante para aquellos que no pueden evitar mantenerse en un círculo dañino de relaciones laborales abusivas.
¿Cómo la terapia cognitivo-conductual (TCC) puede ayudarme?
1. Identificación de patrones de conducta: por ejemplo, a un empleado que constantemente trabaja horas extras no remuneradas porque teme las represalias de su jefe. El terapeuta le ayuda a identificar que este comportamiento se debe a una creencia irracional de que su valor depende de qué tan disponible esté para trabajar.
2. Cuestionamiento de creencias negativas: por ejemplo, frente a una creencia del tipo "Si no hago todo lo que mi jefe pide, me despedirán”. El terapeuta y el cliente trabajan juntos para desafiarla, analizando evidencia a favor y en contra de esta idea. Tal vez, descubren que es poco probable que en realidad sea despedido (son solo amenazas), y comienzan a considerar si la sobrecarga de trabajo es sostenible, considerando otras opciones de trabajo.
3. Desarrollo de Nuevas Estrategias de Afrontamiento: por ejemplo, aprender a decir "no" a demandas irrazonables y a establecer límites claros. El terapeuta enseña al cliente técnicas de asertividad, manejo de conflictos, ayudándolo a practicar estas habilidades en sesiones de role-playing.
4. Refuerzo Positivo: por ejemplo, celebrar los pequeños logros como establecer límites claros con un superior o tomar descansos regulares. El terapeuta ayuda al cliente a ver el impacto positivo en su bienestar y rendimiento laboral.
La TCC no solo aborda los síntomas emocionales y conductuales actuales, sino que también enseña habilidades prácticas para prevenir futuros episodios de abuso y mejorar la resiliencia general.
¿Cuándo es necesario ir al psiquiatra?
Debes considerar acudir a un psiquiatra si:
Experimentas depresión modera o severa: Los sentimientos de desesperanza y tristeza son debilitantes y pueden incluir pensamientos suicidas.
Sufres de ansiedad moderada o severa: La ansiedad resulta en ataques de pánico frecuentes y severos que interfieren significativamente con tu vida diaria.
Tienes síntomas de Trastorno de Estrés Postraumático (TEPT): Experimentas recuerdos intrusivos, evitación de situaciones y un estado constante de hiperactividad tras eventos traumáticos en el trabajo.
¿Qué no debo olvidar?
El abuso laboral puede manifestarse de diversas formas, desde el acoso franco y evidente hasta tácticas sutiles de manipulación emocional. Reconocer las señales de alerta y entender las características psicológicas que hacen a una persona más vulnerable es crucial para tomar acción y buscar ayuda. Las consecuencias del abuso laboral pueden ser devastadoras tanto para la salud física como emocional, incluyendo estrés crónico, ansiedad, depresión y burnout.
La terapia cognitivo-conductual (TCC) puede ser una herramienta poderosa para identificar y cambiar patrones de conducta negativos, desarrollar nuevas estrategias de afrontamiento y mejorar la resiliencia. Para casos más severos, la intervención psiquiátrica es necesaria para proporcionar el diagnóstico y tratamiento farmacológico adecuados.
En NeuroHealth, contamos con profesionales capacitados para ayudarte a abordar estas situaciones y sus consecuencias. Nuestro equipo de psicólogos y psiquiatras está aquí para ofrecerte el apoyo y las herramientas que necesitas.
Después de saber esto ¿quisieras ayuda?
Comments